So�� que encarnaba en un
duende de m�gicos ojos que
yo pinte en sabias de vida con
gusto a miel con sabor a piel.
cruz� un desierto en un
camello y con un angel me
encontr� a mis pies pidiendome
esencias con gusto a amor.
A cambio de su alma se las d�
algo me hizo sentir rotos
corazones descubr� en aquel
d�a tan gris.
Dej� a mi cuerpo
ensangrentado y en una
monta�a encontr� a mi ser
cubierto de heridas que ya
curar� que ya sanar�.
Mi dios, siento garr�s en mis
venas qu� m�gica sensaci�n
descubr� para no romper a mi
coraz�n.